«El Cáncer de Mama no duele» (1/3)

Hoy me gustaría abrirme un poco más y contaros un mi experiencia ante el diagnóstico de la enfermedad que tengo. Creo que al contarlo puede que me haga un poquito más fuerte y me lleve a enfrentarlo mejor de lo que ya lo hago.

Hace ya casi unos tres años que me encontré un pequeño bulto en el pecho pero claro, nunca piensas en que pueda ser nada malo. Algún ganglio o bultito de grasa quizás. Vaya que no le eché cuenta ninguna hasta que, prácticamente al mismo tiempo a mi madre le detectaron cáncer de cuello de útero y a mi abuela de colon.
Hablaba con ellas por teléfono cada día y siempre acabábamos con el mismo tema de conversación, en que tenía que pedir cita cuanto antes para que me palparan el pecho. Y así lo hice tras muchos dolores de cabeza que me dieron porque yo seguía tan pasota como siempre.

Fui en Abril del pasado año a la ginecóloga para que me palpara las mamas y me dijo que estaba todo perfecto, que se apreciaban dos bultos móviles, que por mi edad no me tenía que preocupar de absolutamente nada. Igualmente, me dio cita para una ecografía de mama el 2 de Julio de 2018, fecha en la que operaban a mi madre y tenía que viajar a Sevilla para estar con ella, son situaciones que antepones a cualquier cosa. Así que perdí la cita… Pasó un tiempo antes de volver a demandar otra y cuando lo hice a finales de Noviembre me hicieron esperar hasta el 8 de Marzo, el día de la Mujer Trabajadora.

Me sonó la alarma a las 10 de la mañana habiéndome acostado a las 8h después de una noche intensa de trabajo. Fui sola, no sentía la necesidad de ir con nadie porque estaba muy tranquila de que no sería nada.
Y mi turno, entré en la consulta y me desvestí de cintura para arriba como bien me indicó la enfermera. Me tumbé en la camilla y me echaron gel en la mama izquierda y tras explorarme, me dijo que estaba todo perfecto y volvió a echarme gel esta vez en la mama derecha. Miraba y miraba sin decir nada y cogiendo medidas constantemente, así que decidí romper el silencio:
– ¿Es un bultito de grasa no?
– No, no lo es.
– Bueno algún ganglio. Vaya a mí no me duele ni nada.
– No es un ganglio tampoco. Tienes que saber que el Cáncer de Mama no duele.
Y en ese momento se me cayó el mundo encima, intentaba contener las lágrimas mientras la doctora seguía explorándome y midiendo la anomalía tenía en el pecho. Al terminar me limpié los pechos y me pasaron a la sala de al lado donde me realizarían una mamografía. Estaba desconcertada, nunca me habían realizado ninguna y, tenía el miedo metido en el cuerpo. Tras la prueba salió la médica a avisarme que me llamarían del hospital para hacerme una biopsia de lo que tenía en el pecho ya que tras las pruebas realizadas no sabía con exactitud de lo que trataba.

A la semana siguiente volví a tener cita con mi ginecóloga habitual para que me diera los resultados de la ecografía y mamografía. Fui con mi pareja porque ya me daba pavor ir sola, no sabía lo que me podían decir.
Pero para mi sorpresa, las palabras de la doctora fueron casi las mismas que cuando me palpó:
– Los bultos son exceso de tejido mamario, te llamarán para coger una muestra y buscar el porqué de ello. Pero ya os digo, estad tranquilos porque a tu edad no sale nada malo.

Y así es cómo empezó mi contacto con los hospitales y con esta dichosa enfermedad.

Ya os iré contando más a medida que vaya pasando el tiempo.

¡Nos vamos leyendo luchadores!

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